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Letras para Volar

Las Competencias Lectoras y el Programa de Fomento a la Lectura Letras para Volar

Uno de los aspectos que es parte fundamental del programa Letras para Volar es la investigación sobre el desarrollo de las competencias lectoras en los niños, jóvenes y adultos que conforman la población jalisciense. Su importancia reside en que las habilidades, destrezas y aptitudes que se despliegan en el momento en que nos enfrentamos a un texto marcan al individuo en la forma de comprenderlo.

Letras para Volar trabaja a través de sus instrumentos (lecturas, cuentos, textos) varios niveles de comprensión lectora, entre los que destacamos los siguientes:

  1. El nivel literal. Reconocer y recordar los hechos tal como aparecen en el texto. En este nivel se compone de dos procesos: el acceso léxico y el análisis. En este nivel se trabaja la memoria a largo plazo a través de la comprensión auditiva y la asociación con los significados.
  2. Interpretativo o inferencial.
  3. Crítico. En este nivel se relacionan las experiencias del individuo y el conocimiento previo que el lector tiene con el texto. Sus procesos son: Integración, resumen y elaboración.
  4. Apreciativo. En este nivel el lector emite juicios personales acerca del texto, que generalmente son de tipo estético.
  5. Creador.
  6. Meta-cognitivo. La meta- compresión lectora es el desarrollo de las habilidades que se despliegan en el control de la comprensión de un texto, a través del análisis de los contextos y condiciones en los que se encuentra el sujeto.

La propuesta metodológica para el aborde de estos nivel en un ámbito epistemológico conjuga la categorización de Bloom y los principios que postula el propio programa, que son a saber: el gusto por la lectura, la difusión del pensamiento científico, la solidaridad y justicia social y una relación sustentable con nuestro entorno.

Es necesario advertir, que letras para Volar no solo se focaliza en el área cognitiva de los niveles de comprensión lectora, sino que también los aborda desde lo afectivo y lo social, tratando de establecer diferencias y generando hipótesis que vinculen estos ámbitos para lograr que la experiencia de la lectura no se vea limitada en lo meramente epistémico.

La OCDE define como competencia lectora “la capacidad de un individuo para comprender, utilizar y reflexionar sobre textos escritos, con el propósito de alcanzar sus objetivos personales, desarrollar sus conocimientos y capacidades y participar en la sociedad”.