Como parte de las actividades del Programa Universitario de Fomento a la Lectura “Letras para Volar”, este martes 27 de noviembre el ilustrador Ricardo Peláez presentó Informe negro, en el salón Elías Nandino de la Feria Internacional del Libro

Peláez abrió su participación haciendo un breve recuento de cómo la imagen en historietas o novelas gráficas ha sido uno de los motivos por los que la gente se acerca a la lectura. Recordó títulos como Chanoc, Memin, Kalimán La Familia Burrón, Torbellino, Tawa, y cómo en ellos se forjaba a los iniciales lectores: “hubo una época en que la historieta no era un lenguaje indigno o que era sinónimo de que era lectura para alguien que no sabía leer o que ejercía mal su capacidad lectora”, declaró además que “la historieta forma parte muy importante del panorama editorial, pues desde la historieta se están contando historias que no se pueden contar sólo con palabras”.

Informe negro es uno de los cuentos de Francisco Hinojosa e ilustrado por Ricardo Peláez, perteneciente a la “Colección Amigos de Letras para Volar”. Enfocado hacia el lector adolescente, hecho por frases y parodiando el estilo de la novela negra, el protagonista -un hombre que labora en una fábrica de clips- necesita esclarecer un crimen. El ilustrador explicó que, al no haber un guion técnico para él ni una descripción muy detallada del personaje, se permitió caracterizar al personaje como “un tipo panzoncito, narizón”.

Aprovechó el momento para del proceso creativo que siguió en la historia de Francisco Hinojosa, desde el proceso de lectura, la creación de los personajes, el preboceto a lápiz y el boceto a color que se presenta para su aprobación; mientras explicaba, permitió a los asistentes mirar y palpar de cerca las imágenes que dan vida a los personajes del libro. En cada uno de los pasos, detalló la técnica y materiales utilizados. “A mí me dan un texto, lo leo, entiendo la historia y me dice la editorial en cuántas páginas debo resolver el cuento, de hecho, Pancho Hinojosa, dice de este cuento que es una novela en cien capítulos” puntualizó.

Al finalizar la participación, los asistentes abordaron temas como la promoción a la lectura, la formación de lectores y cómo la imagen puede no sólo ser el vínculo sino el apoyo para una comprensión más profunda de las historias: “hacer lectores y convertir a todos en lectores es la parte del trabajo que todos debemos hacer” finalizó Peláez